Declarada Patrimonio de la Humanidad desde Junio de 2009, el faro fue construído por los romanos en el S.II. La fachada actual es de estilo neoclásico fruto de una remodelación del S. XVIII. Existen varias leyendas atribuídas a la edifición, entre las que cabe destacar las que se relacionan con Breogán y con Hércules.
La playa de Riazor es la más conocida de todas las de la ciudad. Se encuentra próxima al estadio de fútbol de Riazor del Deportivo y llega en su extensión hasta la siguiente playa, la playa del Orzán. Tiene una longitud de 600 metros y es de arena gruesa. Es una playa urbana céntrica y muy concurrida pero a cambio, muy bien cuidada y con todos los servicios: Bandera azul, aseos, duchas, alquiler de tumbonas, salvamento y socorrismo, vigilancia, primeros auxilios, acceso para minusválidos, parking... Está rodeada de un gran paseo marítimo, uno de lo mas largos de Europa, que prácticamente rodea la ciudad y goza de un gran ambiente veraniego, ofreciendo al visitante fiestas populares, restauración, bares y cafetería, espectáculos nocturnos, competiciones deportivas y todo aquello que hacen de esta playa uno de los centros de ocio de la ciudad. Leer +
En honor a María Mayor Fernández de Cámara y Pita por su defensa de A Coruña en 1589 contra la Armada Inglesa de Francis Drake. En ella se encuentra situado el ayuntamiento. En uno de los puntos más importantes de la ciudad por su situación a la entrada de la zona vieja y por el ambiente que podemos encontrarnos sobre todo los fines de semana.
Antigua zona militar, en la que todavía se conservan los cañones que defendían la entrada a la ciudad, recuperada ahora como parque público. Se accede a el en coche o caminando desde los barrios al este de la ciudad, o mediante un ascensor panorámico desde la base del monte, por la que discurre el paseo marítimo que recorre todo el litoral urbano. Además de la ciudad, desde este mirador se puede ver parte de la costa coruñesa desde el Cabo San Adrián al Cabo Prior.
En la localidad de O Portiño, en la costa de la ciudad de A Coruña, existe una escultura desde dónde el visitante puede contemplar la bravura del mar y disfrutar de unas fabulosas puestas de sol.
Este monumento que construyó Francisco Pazos es conocido como Ventana al Atlántico, dónde a partir del atardecer adquiere un colorido rojizo gracias a unos focos que proyecta su luz sobre ella.
Un lugar que sin lugar a duda merece ser visitado.